El tono y los contenidos ideales para tu blog corporativo

Una de las cuestiones más importantes a la hora de crear contenido para un blog corporativo es la adecuación del mensaje a su público. Es primordial generar textos con los que el destinatario conecte y empatice y, sobre todo, que entienda fácilmente y se acerquen a él, ya que el blog y sus contenidos puede ser el primer paso para fidelizar a un potencial cliente.

La relación entre los clientes y el blog debe ser habitual, es decir, es importante tenerlo actualizado y publicar habitualmente para que el usuario tenga una dosis habitual de contenidos de calidad. Estos contenidos de calidad requieren un estudio anterior e inicial en el que se analicen cuestiones como el producto, la compañía y el target, puesto que a estos parámetros se tienen que adecuar lo que mencionábamos anteriormente: el tono y los contenidos. Este proceso requiere la búsqueda de un equilibrio matemático entre lo que la empresa ofrece y lo que los clientes esperan.

El blog corporativo tiene una ventaja sobre la página web y es que permite el uso de un lenguaje más natural y suavizado, por lo que es el medio ideal para generar contenidos diversos y para conectar con todo tipo de públicos.

Una vez analizado el público, el redactor debe tener en cuenta qué tipo de lenguaje es más eficaz utilizar. Si se opta por hacer uso de un lenguaje más informal para acercarse a un público, por ejemplo, más joven, el tono ideal se puede expresar en una segunda persona del singular (comunicación de tú a tú). En cambio, si se opta por un lenguaje más formal para generar cercanía con un sector más corporativo o conservador, habrá que hacer uso de un lenguaje más complejo con formas impersonales y lenguaje más técnico.

Dentro de que cualquier publicación tiene, en esencia, una intención comercial o promocional, es importante mantener la coherencia dentro de todo el blog y en cuanto al tono y la intención comunicativa del resto de las comunicaciones corporativas, es decir, el blog ha de ser un complemento de la página web y la empresa en sí y su intención comunicativa debe ser igualmente complementaria y enriquecedora.

Por último, pero no menos importante, es vital, sea cual sea el tono del blog, mantener la corrección léxica y gramatical, ya que esta es la base de cualquier comunicación y cualquier error en la misma puede ser una señal de desprestigio.